Domingo clasico: LA MUJER DEL CUADRO de Fritz Lang.

LA MUJER DEL CUADRO de Fritz Lang.

Thriller, clásico. P:  9/10.

Director: Fritz Lang.

Fotografía: Milton Krasner (B&W)

Interpretes: Edward G. Robinson, Joan Bennett, Raymond Massey, Edmund Breon, Dan Duryea, Thomas E. Jackson, Dorothy Peterson, Arthur Loft, Frank Dawson

Sinopsis: El profesor Richard Wanley ( Edward Robinson) y sus amigos comienzan a obsesionarse con el retrato de una bella muchacha, que está expuesto en el escaparate contiguo al club en que se reúnen.

Richard Wanley, al dejar a sus amigos (el fiscal Frank Laloy y el médico Michael Barkstane), viendo el cuadro observa un segundo reflejo en el cristal y es así como conoce por casualidad a la mujer del retrato, Alice Reed, y acepta ir a su apartamento a ver unos bocetos del autor del cuadro.

Pero allí ocurrirá algo inesperado.

Comentarios: Uno de los grandes clásicos del cine negro americano y una de las obras cumbres de Fritz Lang bien apoyado por un impresionante Edward G. Robinson, una bellísima Joan Bennett y la sorpresa de un Dan Duryea que bordea una actuación de matrícula de honor; con ellos unos Massey y Breon que están perfectos en su respectivos papeles.

Un punto fuerte es el guion sobresaliente (basado en la novela de J. H. Wallis), trabajo y bien trabado, inteligente y lucido. Busca tres puntales muy interesantes. El primero el asesino, un reputado profesor, del tipo del que nunca tu podrías pensar en que lo fuera. Lo segundo es que por una casualidad este el mismo en la investigación. Lo tercero el chantaje que aparece y al fatal atracción como los hilos del destino que manejan caprichosos diosecillos.

Película traficada, de atmosfera inquietante...y unas dosis de humor realmente brillante.

Muy expresionista y lleno de símbolos.

Puede haber fallos (que los hay) pero en una obra de este tipo hasta se perdonan y se olvidan, es más unos personajes increíbles, una situaciones que nos desbordan, una atmosfera intensa y obsesiva, unos diálogos inteligentes y agudos, un ritmo perfecto, una fotografía que nos envuelve y nos hipnotiza, una música deliciosa, perfecta....

Y un final delicioso, perfecto de realización, con un movimiento de cámara sutil y afinado...

Gran montaje, al modo clásico, muy de Lang.