El fin del
mundo en 35 mm. De John Carpenter.
(cigarrette burns)
De la serie
Master of Horror.
Director: John Carpenter.
Interpretes: Norman Reedus, Udo Kier, Christopher
Britton, Zara Taylor, Chris Gauthier, Colin Foo, Gwynyth Walsh, Christopher
Redman, Julius Chapple, Taras Kostyuk.
Argumento:
Un cinéfilo buscador de cintas raras con un cine más raro aun, Kirby Sweetman,
recibe el encargo de buscar una cinta maldita “La fin absolu de le monde”, que
proyectada en el festival de Sitges provoco la lucra entre los espectadores y
la muerte de alguno de ellos por el Sr. Ballinger un millonario aficionado a
cintas extrañas y oscuras. En su búsqueda ira encontrando situaciones extrañas
y el mismo se verá influenciado por la película. Del cine a una reunión con un
crítico de cine, de ahí a la oficina de filmografía, de ahí a un extraño
estudio de películas snuff y, más tarde, con la mujer del director del film
maldito. Lleva la película al ofertante y tiene que volver para presenciar la
locura y muerte por todos lados. El mismo alucinado por las imágenes del film
se mata y el ángel castrado se aleja con la cinta.
La idea es
muy original, una peli capaz de interactuar con el espectador, de modificar su
punto de vista, su concepción de la vida y de la normalidad. El poder de una
película así seria impresionante, el arma más siniestra. Y por otro lado esta
las ganas de mirar una película, la que te han recomendado, la que te han hablado, de
escenas aberrantes, del cine en suma y del cine personal usado para expresarte.
Recuerda mucho a La boca del miedo solo que allí era un libro y, más tarde, la
versión cinematográfica que contempla nuestro alucinado amigo.
Desde el
primer momento, el ángel sin alas, hasta el final la película te hipnotiza. Las
escenas están perfectamente engarzadas, desde esa entrevista con el crítico de
cine que lleva años haciéndola, hasta ese padre de la chica que busca su
dinero. Udo hace un papelón y el extraño director de snuff es terrorífico en su
naturalidad.
Abusa un
poco de gore, aunque medido y en escenas claves.
El ángel,
patético es una obra de maquillaje y el criado oriental esta sensacional.
Una joya.
No
perdérosla sobre todo en Dvd, una edición primorosa con miles de extras,
comentarios, entrevistas a Carpenter y los productores, etc.
Conseguirla,
no lo vais a lamentar, más bien al contrario.
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