Sabado clasico: CRIMEN PERFECTO de Alfred Hitchock.

CRIMEN PERFECTO de Alfred Hitchock.

1954. Thriller, clásico. P: 8/10.

Director: Alfred Hitchock.

Intérpretes: Ray Milland (Tom), Grace Kelly (Margot), Robert Cumming (Mark), John Williams, Anthony Dawson (Swan)..

Música: Dimitri Tiomkin.

Sinopsis: Tom jugador de tenis y un vividor decide deshacerse de su adinerada y rica mujer para conseguir su herencia, Margot, para lo que contratara a un criminal, viejo conocido suyo de múltiples nombres, tratando de hacer el crimen perfecto, casi lo consigue. Mientras tanto Margot tiene una aventura extra matrimonial con el escritor americano de novelas Mark y es chantajeada por un desconocido.

Comentario: Toda una proeza técnica este film, que esta injustamente subvalorado. Como en La soga, el espacio fílmico es muy reducido, apenas una habitación en la que todo va transcurriendo;  para no escaparse de su procedencia teatral Alfred lo configura como una tragedia en tres actos y en cada uno de  ellos pone su impronta en unas imágenes para el recuerdo.

Los actores, sobre todo Ray en su papel de marido cornudo, aparentemente educado y encantador pero más frio que el hielo polar y peligroso como una víbora. El contrapunto es el inspector de Scotland Yard, un toque e ironía y, al tiempo, flema británica, un buenazo el tío que hace lo que tiene que hacer.

Hay momentos excepcionales como la conversación entre Tom y su ex colega; llena de matices y amenazas sibilinas, a la amenaza el premio del dinero. Una escena perfecta.

Lo mismo con la escena en el intento de asesinato de Margot, genial de planificación y coreografía, esa salida desde la espalda, como cae sobre la mesa, como coge las tijeras y como al caer al suelo se las incrusta todavía más muriendo.

Y las múltiples excusas que Tom va inventado sobre la marcha para evitar ser acusado y dirigir las dudas sobre su mujer.

Genial, irrepetible.

Una banda sonora que acrecienta los momentos de forma admirable, una fotografía casi perfecta, una iluminación con claroscuros.

Una gran película. Para ver y recordar otra vez.