jueves, 6 de agosto de 2015

Millennium 3: La reina en el palacio de las corrientes de aire de Daniel Alfredson.


Millennium 3: La reina en el palacio de las corrientes de aire de Daniel Alfredson.

2009. Thriller, secuela. P: 7/10.

Director: Daniel Alfredson

Música: Jacob Groth

Fotografía: Peter Mokrosinski

Intérpretes: Michael Nyqvist, Noomi Rapace, Michalis Koutsogiannakis, Anders Ahlbom, Lena Endre, Sofia Ledarp, Georgi Staykov, Per Oscarsson, Annika Hallin, Micke Spreitz, Alexandra Eisenstein, Agnes Kittelsen, Jacob Ericksson, Tina Berg

Sinopsis: En este desenlace de la saga Millennium la tensión se dispara. Tras el agónico final de La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina, puede que Lisbeth Salander haya sobrevivido a ser enterrada viva pero sus problemas están lejos de haber acabado. Está acusada de triple asesinato y fuerzas poderosas intentan silenciarla de una vez por todas.

Mientras, Michael Blomkvist escarba en su oscuro pasado y pronto encuentra sus huellas.

Comentarios: Película que cierra todos los cabos abiertos de forma más o menos brillante en una realiza con mucho mejor que la segunda entrega que, para mí, fue un peñazo absurdo e incoherente. Un final más que digno e interesante, digamos que satisfactorio. No alcanza, en cambio a la primera entrega de la saga.

Se apoya el realizador en una descomunal actriz, toda una sorpresa, Noomi Rapace que en su papel de Lisbeth borda una interpretación fuera de serie aun en las escenas de esa cama de hospital, deshecha, debilitada y llena de vendajes. El único pero es que hay muchos personajes que no están debidamente presentados, muy desvaídos y desaprovechados como ese joven doctor del hospital que se juega el tipo por su paciente o ese siquiatra (el que tuvo a la joven en su manos) Teleborian que haciendo su papelón queda como en las corrientes del aire que le da título a la película o la embarazadísima hermana de Michael defendiendo a  su cliente de forma brillante y capaz o esa especie de momia o zombi que es el hermanastro Niederman, que da poco juego, muy poco como ese enfrentamiento final casi cómico con su hermana y que acaba literalmente clavado y es que Lisbeth tiene recursos para todo...mejorando en ese juicio final lleno de trampas y argucias en ese enfrentamiento de miradas entre Lisbeth y Teleborian....

Este cuento se acabo...

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