GARRAS
HUMANAS de Tod Browning.
(The
unknown)
1927. Drama,
terror. Blanco y negro, muda. P: 9/10.
Director: Tod Browning.
Fotografia: Merritt Gerstad.
Interpretes: Lon Chaney (Alonzo), Joan Crawford
(nanon), Norman Kerry (Malabar), Nick de Ruiz (Zanzi), John George (Cojo),
Frank Lanning (Costra), Polly Moran, Bobbie Mack.
Sinopsis: En
Madrid actúa el famoso circo Gitano Zanzi. Una de sus grandes atracciones es
Alonzo, un artista manco, sin los dos brazos, que dispara y tira cuchillos con los pies
sobre la bella Nanon, la hija del dueño del circo, Zanzi; manco y perseguido
por la policía.
Nanon tiene
una fobia, detesta que los hombres la toquen, sobre todo Malabar, el forzudo,
un apuesto galán que está loco por la chica. Su terror hace que este cómoda con
Alonzo, sin brazos, pero hay secretos…y este tiene la ayuda del enano Cojo para
lo bueno y lo malo.
Comentarios:
Tengo que confesar con las oreja gacha y de rodillas que no había visto todavía
esta película de ese genio que es Tod Browning, si, el director de la inmortal
“Dracula” con Bela Lugosi y la mas inmortal y extraña todavía que es “La parada
de los monstruos”.
No hace
mucho ese cinéfilo que es Juan Manuel de Prada escribió una reseña muy
interesante sobre esta cinta, la podéis leer en: http://www.abc.es/abcd/noticia.asp?id=15933&num=985&sec=35
Una pareja
genial la que formaron Chaney y Browning, once película entre los dos juntos,
once pequeñas obras maestras.
Destaca la
belleza joven y sensual de Joan. Hay una escena de ella en el balcón en al que
la cámara se acerca ella y hace que nos enamoremos, que él corazón nos lata más
deprisa y nos gustase poder viajar por el tiempo y es espacio y tratar de
encontrarnos con ella en esa plenitud.
Hay que
avisar que las escenas del manejo increíble de los pies están realizadas por un
doble que era realmente manco y un prodigio con ellos.
Un cuento
mágico y perverso, una broma cósmica como esa vuelta a casa, con la chica, con
ya los brazos amputados en una operación aséptica y casi futurista de escenario
que contrasta con el resto de los decorados, con la risa histérica primero al
darse cuenta de la situación, de su situación, y después el bajón brutal y
terrible como es misma escena final con los caballos desbocados…
La fotografía
es una maravilla, esas sombras, esas imágenes veladas como por un gas, esa luz
que reluce cuando captura el rostro de Joan o las muecas de Chaney o la mirada
dulce y la sonrisa hipnótica de Kerry…lirismo en estado puro con toques casi
irreales, de fantasía, de otros mundos que están en este.
Antesala que
resulta ser el precedente de esa obra maestra de ”Freak, La parada de los
monstruos “; almas atormentadas,
asesinatos, dolor, siempre dolor, siempre fuera de sitios, mentiras escondidas
tras viejos arneses, triángulos amoroso que devienen en tragedias (Edipo, su
padre y su madre), el perverso en las sombras susurrando maldades…y, al tiempo,
del más viejo de los sentimientos, el amor y la venganza; amor por el que Alonzo
es capaz de perder voluntariamente los brazos; odio por ser capaz de perpetrar
la muerte del padre de la joven primero
por ser un obstáculo en sus deseos y, más tarde, de Malabar, el que le ha
robado el amor de su sueños, el único amor posible para su alma atormentada.
Cain y Abel peleando por el amor de una mujer ¡Y qué mujer!...
Una
curiosidad es que está situada en Madrid, nos lo pone el letrero inicial, y por
ello los personajes son hispanos, nosotros, estereotipos de los nuestros, una
visión de esta España muy peculiar y subjetiva del director...
Se mantiene
en el tiempo, moderna, actual, tremenda sin escenas gore o sangre a
hectolitros…
Los actores
soberbios, destaca la versatilidad de Chaney, el hombre de las mil caras, un
poco de maquillaje y le basta para expresar el amor o la desesperación, y la
belleza y buen hacer de Joan, ya lo digo, lo repito, bellísima, adorable,
maravillosa. No me extraña que alguien de los dos brazos por ella.
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