LA MALDICION DE ROOKFORD de Nick Murphy.
(The Awakening)
2011. Terror, thriller, fantástico. P: 7/10.
Música: Daniel Pemberton.
Fotografía: Eduard Grau.
Interpretes: Rebecca Hall, Dominic West, Imelda Staunton,
Isaac Hampstead-Wiight, John Shrapnel.
Sinopsis: En la época poco después de la primera Guerra mundial
una joven y moderna mujer se dedica a
desenmascara a charlatanes y falso espiritista, escribiendo, incluso
libros sobre ello.
Viaja hasta un lejano internado para investigar una aparente
aparición de un niño que murió años atrás pues otro niño murió no hacía mucho
en dicha escuela.
Cuando cree haber desentrañado todo el misterio se encontrara con más preguntas que respuestas y
se quedara para tratar de descubrir toda la verdad, incluso sobre ella misma y
sus sentimientos…
Comentarios: Brillante y atractiva, una delicia de
producción que nos trae lejanos ecos de las películas de Jack Clayton, con el
sello de la elegancia y buen hacer de las producción británicas de siempre…
Muy densa, con el ritmo ajustado a un metrónomo que
sintoniza o empatiza con los latidos de nuestro corazón, con la música, bellísima,
de fondo, nos adentramos en un mundo de una época pasada, de unos personajes llenos
de traumas y dolientes, humanos al fin y al cabo, lleno de dudas y de inteligencia…destacar
el retrato inicial de unos personajes con sus secretos y remordimientos… Rebeca
y ese ser perdido en la guerra y un cierto sentimiento de culpa, el profesor
con sus traumas de guerra, el otro empeñado en disciplina mientras en su cuarto
mira fotos pornográficas, la institutriz y sus misterios y fantasmas…
Una fotografía cuidada, excepcionalmente trabajada y
planteada, autentica belleza en esos planos y en los movimientos de cámara…acompañada
plenamente por una música deliciosa, bellísima, lo he dicho ya antes y lo
vuelvo a repetir…
Lo mejor: su atmosfera, su dramatismo, sus personajes, su
fotografía, sus escenarios, su música, su ambientación de época…
Lo peor: su final loco…
El trabajo de ambientación es de destacar, como en todas las
buena producciones británicas, la recreación de esa época, los 20, es
insuperable, muy conseguida tanto en vestuarios como en la desfasada faceta tecnológica
(los aparatos de la investigadora son tan curiosos como olvidados y superados)
Nada en la película nos hace pensar en ese final tan neurasténico e
histérico…son 20 minutos casi al estilo americano independiente feroz u
oriental no muy feliz…ese prologo abierto a mil interpretaciones que nos deja
con la miel en la boca y una cierta falta de respuestas que nos desmotivan un
tanto….
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