jueves, 28 de noviembre de 2013

Secuestradores de cuerpos de Abel Ferrara.


Secuestradores de cuerpos de Abel Ferrara.

1993. Ciencia ficción, terror, remake. P: 6/10.

Director: Abel Ferrara

Música: Joe Delia

Fotografía: Bojan Bazelli

Interpretes: Gabrielle Anwar, Terry Kinney, Billy Wirth, Christine Elise, Meg Tilly, Forest Whitaker, Reilly Murphy, R. Lee Ermey, Kathleen Doyle, G. Elvis Phillips, Tonea Stewart

Sinopsis: En una base militar, una familia (el padre va a realizar algo así como una investigación de productor almacenados y sus restos dentro de la base y alrededores) observa cómo sus vecinos y amigos se comportan de una manera extraña. Poco a poco, se verán inmersos en una terrible pesadilla de la que no podrán escapar.

El niño se escapa de la escuela cuando comprueba que todos los niños, menos él, hacen exactamente lo mismo y pretenden hacer que se duerma...

Comentarios: nueva versión, el tercero cronológicamente,  de la clásica novela de CF homónima de : Jack Finney (Body santchers).

 Aunque no se puede comparar con la versión de Don Siegel de 1956 y ni tan siquiera con la de Philip Kaufman de 1987, el resultado es entretenido gracias, sobre todo, a unos atractivos efectos especiales y el ambiente cerrado de la base militar. Hubo una posterior con el título de "Invasión, 2007" de Oliver Hirschbiegel que lo mejor que aporto fue la presencia de la actriz Nicole Kidman, poco mas.

La película se ve bien y divierte. Lo mejor ya lo he dicho son los efectos especiales, muy conseguidos, escasos pero muy potentes. En esa línea las mejores escenas son las de la posesión con esos tentáculos o zarcillos con que envuelven al humano a duplicar; la que le corresponde a la chica es tremebundo y asqueroso pero con resultados muy conseguidos; lo mismo en la que corresponde a la del hospital donde son llevados a dormir los normales....

Los actores muy planos y pobres de recursos y expresividad; ni siquiera el gran Forest Whitaker logra salvar sus escasa dos escenas que tira por la borda por culpa de cierta sobreactuación y el guion nefasto y pobre.

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