Danza macabra de Antonio Margheriti, Sergio
Corbucci
1964. Terror, fantástico. P: 7/10.
Dirección: Antonio Margheriti, Sergio Corbucci
Música: Riz Ortolani
Fotografía: Riccardo Pallottini (B&W)
Intérpretes: Barbara Steele, Jorge Rivier, Margarete Robsahm, Arturo Dominici, Silvano Tranquilli, Sylvia Sorrente, Salvo Randone
Sinopsis: Un periodista británico que intenta entrevistar a Edgar Allan Poe
durante la visita que el escritor americano hace a Londres termina liado en una
curiosa apuesta. Un noble llamado Lord Blackwood le desafía a pasar esa noche
(la noche de difuntos) en una de sus propiedades: una mansión supuestamente
embrujada. De la que, por cierto, no ha salido vivo ninguno de los que, con
anterioridad, han intentado hacer lo mismo.
Como es natural, el periodista acepta el reto.
Comentarios: Parece ser que la dirección de Sergio Corbucci fue en un par
de escenas para ganar tiempo en dicha producción, poca cosa pero ahí está. Antonio
Margheriti, como es menos conocido tiene varias película notables y aconsejables
como "Los largos cabellos de la muerte", "Crimen en la
residencia", "La horrible noche del baile de los muertos (remake de
este mismo film)", "La isla del tesoro con Orson Wells",
"Siete muertos en el ojo del gato", "Virus", etc...
Rodada en los sesenta tiene ese dulce y notable encanto de las producciones
de los 30. Deliciosa.
Lo mejor es ese inicio con ese relato de "Berenice" en los labios
de Poe, realmente impresionante, para seguir con ese viaje y entrada en soledad
completa en la mansión de los horrores...pequeños detalles se van atisbando: el
reloj de péndulo parada que da las campanadas, ese cuadro cuya figura oscila y
parece viva...para sorprendernos con esa aparición angelical de Elizabeth. Todo se vuelve como una
pesadilla y va perdiendo enteros conforme van apareciendo nuevos personajes:
Julia, el mozo, el doctor Marcus, la pareja de jóvenes. Al tiempo vamos
aprendiendo viendo escenas que se van superponiendo en el tiempo y como los
habitantes de la mansión siguen vivos por el poder de la sangre de los vivos,
en una sesgada referencia vampírica con algunas escenas en ese sentido.
Todo, en general, esta mas que bien salvo, para mi gusto y es una pequeña
exageración, ya lo sé, la iluminación. Se la pudieron haber currado un poco
mas, así como esos juegos con las velas y sus longitudes, sus apagados y
encendidos, en fin, todo perdonable.
La atmosfera esta tremendamente conseguida, la tensión se palpa por todos
lados ayudad por esa mansión llena de recovecos, del sótano, de puertas que se
cierran o se abren...
Un final de tragedia griega, inesperado.
Destacar los personajes. Me encanto esa mujer tan torturada y romántica
como es Elizabeth en una convincente e hipnótica Barbara Steele. Destacar
también a Silvano Tranquilli como Edgar Alan Poe con un soliloquio inmenso
inicial, lo borda el tío, impresionante.
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